viernes, 26 de julio de 2019

Spiderman: Un día más. - ¿The Power of Love?

La Sinopsis:
Spiderman está contra las cuerdas. Los sucesos ocurridos durante la Guerra Civil Superheroica le han convertido en un fugitivo, pero las consecuencias para su familia son aún peores. El Hombre Araña ha de embarcarse en una misión de la que no puede salir victorioso: salvar la vida de la Tia May. ¿Hasta dónde estará dispuesto a llegar en su empeño? ¿Qué será capaz de sacrificar?
Esta enigmática saga, escrita por Joe Michael Straczynski y dibujado por Joe Quesada, dividió la opinión de los aficionados como nunca antes había ocurrido. "Un día más" supone un capítulo fundamental en la historia del Hombre Araña.


La Edición:

Entrega nro 7; Tomo nro 51 del Coleccionable de Spiderman de Salvat.


La Reseña o Valoración Personal:
La cosa es así. Hagamoslo rápida porque de verdad detesto esta historia.
Quesada siempre, pero SIEMPRE, tuvo la idea de que un Peter Parker soltero y con problemas amorosos sería mucho más interesante que el Peter Parker maduro y casado que todos conocimos (Una pena no poder escribirlo en presente) Por supuesto, ese interés se traduciría en mejores ventas y Peter volvería a vivir situaciones del tipo comedia romántica, decidiendo entre Gwen o Mary Jane, a la vez que se hace un huequito para detener a Kraven el Cazador, Kingpin o Mysterio.
Claro, todo esto funcionó excelente, en su momento. Pero la lógica y esperable evolución del personaje hizo que estos días dorados queden atrás, que Peter crezca, madure y siente cabeza (Todos sabemos de su matrimonio con Mary Jane, es algo que casi que lo enseñan en las escuelas públicas) y, como era de esperarse, muchos de aquellos jocosos personajes secundarios comenzaron a desaparecer. (Muchos de ellos evolucionando, también) Claro, señores, Peter Parker maduró como personaje, algo que, evidentemente, Joe Quesada odió con todas sus fuerzas.
Una cosa sí es cierta, muy pocos guionistas supieron hacer buen uso del personaje de Mary Jane Watson como la flamante esposa. Casi siempre era solo un elemento decorativo y sexualizado, que estaba ahí solo para recordarnos que el héroe casó con una espectacular supermodelo.
Muchos artistas intentaron separarlos, ya sea por secuestros o aviones que explotaban en el aire. Pero Mary Jante siempre volvía a la vida de Peter Parker, tarde o temprano, para bien o para mal. ¿Será el poder del amor?
Cuestión que, entre tantas idas y venidas, llego Joe Michael Strackzynski, guionista que revitalizó a Spiderman y que, además, consiguió lo que hasta ahora parecía imposible: Mary Jante se volvió un personaje interesante, útil, profundo y vital en la vida del héroe. La perfecta compañera. Y claro, seguramente Joe Quesada habrá golpeado paredes y ventanas pero, por primera vez en muchos años, el matrimonio Parker era algo fantástico.
Pero la vida del universo Marvel siguió, y la de Spiderman no hizo más que complicarse. Luego de perder su casa de Forest Hill, Peter se muda al hogar de los Avengers y, rápidamente, traba camaradería con Tony Stark. Casi al mismo momento se desata la ya tan conocida Civil War de los superhéroes de Marvel y Peter, aconsejado por Tony para demostrar su apoyo a la Ley de Registro Superheróico, decide desenmascararse por televisión en vivo, a nivel mundial, rompiendo más ratings que Rolando Rivas, Taxista.
Esto le trae severas complicaciones ya que, al traicionar a Tony por cuestiones ideológicas y unirse al bando del Capitán América, Peter se convierte automáticamente en un fugitivo y ya no hay ningún lugar seguro para él y su familia.
Kingpin, aprovechando esta oportunidad de oro para hacer la vida de Spidey aún más miserable, contrata un francotirador para que mate a su más acérrimo enemigo (Después de Daredevil, claro) y, nomás que Peter tiene tanta mala suerte que, al momento en el que le francotirador dispara él se agacha por instinto (Y por su sentido arácnido, claramente) y la bala se estrella contra la frágil pero inmortal Tia May.
Aquí es donde empiezan los nefastos planes de Joe Quesada para disolver al matrimonio Parker.
Peter es incapaz de dejar morir a Tia May. La vieja vivió mil años y vivió bien, pero como la bala era para él, Spiderman no puede evitar sentirse extremadamente culpable y decide revolver cielo y tierra con tal de encontrar una mínima chance de salvar a su Tia, pues el pronóstico de May era más que terminal.
Teniendo en cuenta todas estas cuestiones, Strackzynski y Quesada nos brindan un relato que no será recordado por su calidad argumental, sino más bien por toda la polémica y el alboroto que trajo a la vida de Spiderman. Amparándose en el terrible dolor que carcome a Peter tras lo sucedido con la Tia May, nuestro joven héroe arácnido busca ayuda de todo tipo, desde las artes místicas del Dr. Strange hasta los tratos infernales con el demonio Mefisto. Y aquí es, precisamente, donde se encuentra el verdadero problema de esta historia: Mefisto se aparece con un poder capaz de curar a la Tía May, pero a cambio de un importante precio, Peter deberá sacrificar el amor que hay entre él y Mary Jane y, obviamente, borrar de la existencia su matrimonio.
Claramente podemos suponer cuál es la decisión de ambos. Personalmente la encuentro erronea y muy discutible, pero también es cierto que no había otra forma de ejecutarlo. Este "Mefistazo" (Llamado así por los fans) sirvió para extirpar todas esas molestías de la continuidad de la vida de Spiderman pero sin volver enteramente en el tiempo, sino más bien cambiando pequeños detalles del pasado que hacen que el presente sea un tanto diferente.
El objetivo de toda esta movida buscaba revitalizar, en cierta manera, la vida del trepamuros devolviéndole aquel viejo status quo que podíamos disfrutar cuando Peter Parker era un estudiante soltero, con problemas de dinero y un trabajo mal remunerado. Todo esto, integrando nuevamente a un gran conjunto de personajes secundarios que, no son otros que los viejos amigos de Peter Parker (Harry Osborn entre ellos) y algún que otro personaje nuevo como, por ejemplo, la oficial de policia Carlie Cooper.
Así, Peter Parker retrocedió décadas de casilleros en su evolución y crecimiento como personaje que solo sirvió para dividir las aguas entre los fans, y Marvel cosechó más críticas que elogios con la nueva solteria del personaje.
Personalmente pienso que, si bien han habido historias excelentes de Spiderman desde ese trágico día (Aunque ninguna fue escrita por Dan Slott) el nuevo status quo del personaje (viejo, en realidad) no aportó absolutamente nada nuevo bajo el sol, y Peter Parker pudo haber protagonizado estas historias estando casado, tranquilamente. Además, de alguna forma u otra, Spiderman siempre termina volviendo a Mary Jane, y viceversa, lo que hace que nos sigamos planteando, al día de hoy, cuan innecesario fue para el personaje la disolución de su matrimonio.
¿O será que el amor de Peter Parker y Mary Jane es, en verdad, mucho más fuerte que cualquier decisión editorial? Yo creo, sinceramente, que sí.
6 Mollitos para esta historia.




jueves, 25 de julio de 2019

Spiderman: Nada puede detener al Juggernaut. - Una fuerza imparable que choca con un arácnido inamovible

La Sinopsis: A principios de la década de 1980, el guionista Roger Stern se alió con el dibujante John Romita Jr. para conducir al trepamuros de Marvel hasta la excelencia. Durante dos años irrepetibles, estos legendarios autores enfrentaron a Peter Parker con nuevos enemigos, villanos procedentes de los más insospechados rincones del Universo Marvel, gigantescos cambios personales y, en definitiva, grandiosas aventuras. Este tomo recopila las primeras historias de esa mítica etapa de Spiderman.

La Edición:


Entrega 6; Tomo nro 9 del Coleccionable Spider-man de Salvat.


La Reseña o Valoración Personal:
Estamos ante uno de esos tomos que uno fácilmente podría llamar "Imprescindible". Las opciones se reducen a muy pocas, comprar o comprar. Porque sabemos que nos estamos llevando un producto de verdadera calidad.
La historia principal es sencillamente brillante, pero este tomo en cuestión contiene otras historias en las que uno puede palpar, casi con amor absoluto, lo que fue una de las verdaderas épocas doradas del arácnido.
Aquí vemos a Spiderman enfretandose a un Buitre que no se da por vencido y no está dispuesto a envejecer, como a sí también a Black Cat y al Exterminador de Tontos (Esta es, tal vez, la historia más absurda pero no deja de ser hilarante y entretenida. Y así es como Salvat, de la mano de Roger Stern y un John Romita Jr que, por esas épocas, aún sabía dibujar, nos allanan el terreno para la verdadera atracción principal: La batalla con el Juggernaut.
Estamos ante una de las mejores historias de Spiderman (A mí juicio, además, una de sus batallas más duras), Madame Web (Un personaje recurrente de la época, una anciana vidente que muchos recordarán de la maravillosa serie animada) pide ayuda a Peter porque el Juggernaut (El formidable enemigo de los X-Men, hermanastro de Charles Xavier, que recibe sus poderes de una joya mágica llamada Cyttorak)  anda tras ella, Spiderman intenta detenerlo pero fracasa  y el Juggernaut, pues, arranca a Madame Web de su soporte vital, lo que puede acabar por matarla.
Abrumado por la culpa, nuestro arácnido héroe hace frente al Juggernaut al que impide huir.
Tras sufrir una verdadera paliza a manos de semejante coloso, y con la típica  y muy conveniente ausencia de los X-Men, Los Vengadores, Los 4 Fantásticos o cuánto héroe se les ocurra, Spiderman acaba por derrotar a su imparable adversario. Con un tremendo golpe de suerte y logrando lo imposible, todo ello bajo la ferviente idea de evitar que se repita la muerte de un inocente al que él pudo haber protegido
Roger Stern firmó una de las mejores historias de Spiderman, una que lo define como un héroe cuyos principios lo empujan hasta el límite, hasta conseguir lo imposible. El sentido de la responsabilidad de Peter es algo que lo define (Aunque, a veces, muchos guionistas parecen olvidarlo) y Stern lo supo reflejar en una aventura en la que John Romita Jr. estaba comenzando a alejarse de la sombra de su padre (Pero aún dibujaba de manera decente, y no como ahora) , creando su propio estilo y demostrando que sabía imprimir fuerza a cada viñeta la par que nos mostraba un Nueva York auténtico.
Es imposible que ambos autores no supiesen que estaba creando una historia épica y es que Nada puede detener al Juggernaut se eleva, con el drama de enfrentarse a la imposibilidad, como el botón de muestra de lo que se puede esperar de Spiderman: lo imposible.
10 Mollitos para esta increíble joya del noveno arte.




martes, 16 de julio de 2019

Spiderman: La Saga del Clon. - El día del Chacal y sus alegres clones.

La Sinopsis:
Ha llegado el día en el que El Chacal va a hacer todo lo posible por destrozar totalmente a Spiderman. Los fantasmas del pasado volverán a acechar a Peter Parker, mientras que la copia de alguien inesperado acecha en las sombras. ¡Asistiremos a una confrontación con los enemigos más mortales del héroe, en una saga arácnida que ya es clásica en el Universo Marvel!


La Edición:


Entrega nro 4; tomo nro 5 de la Colección Definitiva de Spiderman.




La Reseña o Valoración Personal:¡Ah, pero que buena época para la vida del trepamuros! Historias dinámicas y llenas de acción, personajes secundarios fuertes y profundos, villanos misteriosos, perversos y crueles, situaciones cargadas de un dramatismo descomunal y un Peter Parker que nunca se sintió más real y humano.
Es una buena manera de definir la magnífica etapa de Gerry Conway, Ross Andru y Gil Kane en la cabecera principal del arácnido. Pero ya hablaremos de ella con mayor detenimiento. Hoy solo nos detendremos en una de las mejores aventuras de Spiderman. Sí, señores, estoy hablando de la primera Saga del Clon. Aquella que fue construida de una manera fenomenal, presentando uno de los villanos más despiadados de la galeria de Spiderman, el Chacal. A su vez, en esta saga, uno de los mejores personajes de Marvel Comics vio la luz, Punisher, quien por aquel entonces era apenas un pistolero que lo pone a Spidey en un predicamente pero que, pronto, escalaría hasta convertirse en el trágico y descarnado personaje que conocemos hoy en día.
Hay que tener presente que esta historia nació con un objetivo claro, regresar a Gwen Stacy a la vida. Peter Parker se encuentra superando su duelo poco a poco, la herida de la muerte de Gwen (La única mujer que amó, en palabras del mismo protagonista) aún está cerrando y solo la compañia de Mary Jane Watson parece ser capaz de mitigar un poco el dolor.
Mientras nuestro querido Peter intenta seguir adelante, compajinando su vida estudiantil con su vida superheroíca, una misteriosa figura acecha entre las sombras y comienza a hurdir un plan que pondrá a prueba a nuestro héroe en cuerpo y mente.
En este tomo se nos presenta pues, una historia enrevesada, con un aire duro, canalla, que respira un aire setentero puro y duro. El guión es potente y los personajes crecen y evolucionan a lo largo de la historia.
El punto álgido del relato se alza, triunfante, cuando Spiderman descubre que el responsable de todos sus males es Miles Warren, profesor de universidad de Peter Parker, quien al no poder superar la muerte de Gwen Stacy decide clonarla con unas muestras de ADN que aún conservaba en el laboratorio. Así, Spiderman descubre este perverso y turbio secreto, a la vez que debe enfrentarse a su propio clon, en una batalla cargada de frenesí, violencia y dramatismo.
Los dibujos de Andru y Kane pueden parecernos, en perspectiva, algo retro, pero verdaderamente transmiten potencia y energia, impregnando en la historia un tono perfecto y una perspectiva por demás sobresaliente.
9 Mollitos para esta obra increíble... o, mejor debería decir, asombrosa.


Spiderman: Spider-Island. - Los bizarros fetiches de Slott son tantos que le sirven para rellenar una historia mediocre.

La Sinopsis:Manhattan ha sido infectada: la gente convencional está consiguiendo poderes arácnidos sin motivo aparente. Y muy pocos de ellos son conscientes de que un gran poder conlleva... bueno, ya sabes qué. Todo ha cambiado para el verdadero Hombre Araña. Porque, cuando todo el mundo es Spiderman, nadie lo es realmente.
Dan Slott desarrolla uno de los más espectaculares eventos de la historia del trepamuros, que afecta a la plana mayor del Universo Marvel y que cuenta con el excepcional arte de Stefano Caselli y Humberto Ramos.

 La Edición:


Entrega nro 3; tomo nro 58 de la Colección Definitiva de Spiderman.

La Reseña o Valoración Personal:Hice hasta lo imposible por que esta historia de Spiderman me gustara. Lo leí con tiempo, con detenimiento, me tomaba las pausas necesarias para mechar otro tipo de lectura mientras intentaba avanzar con esta, incluso volví a leer desde el principio, intentando rescatar algunas ideas positivas sobre este trabajo. En verdad hice de todo para que me gustara. Pero no. Definitivamente el Spiderman de Dan Slott no es para mí.
Mi relación con Dan Slott tampoco ayuda, a decir verdad.
Bueno, tampoco es que haya tenido una gran relación con el tipo, o que sea su amigo. Nada más lejos de la realidad. Gracias a Dios no lo conozco y jamás lo conoceré.
Básicamente se puede decir que odio a Dan Slott sin conocerlo.Pero lo odio por lo que le hizo a mi querido superhérore, por cómo bastardeó el gran legado de Peter Parker y de Spiderman.
Sí, señores. Soy de esas personas que tienen la ferviente creencia de que Dan Slott, literalmente, ARRUINÓ a Spiderman. No puedo rescatar nada de Spider-Island, absolutamente nada. Me pareció una historia mediocre, ridícula, aburrida, absurda y verdaderamente falta de ideas, que solo sirve para alimentar ese fetiche perverso que tiene Slott por llenar sus historias de diferentes Spidermen para luego matarlos, o lo que sea. Es como si este escritor sintiera placer matando arácnidos en masa. Aunque en este caso no mata a nadie, pero la sensación es similar... Me estoy esparciendo demasiado. Vamos por partes.
La trama principal comienza cuando un grupo de ciudadanos empieza a desarrollar poderes arácnidos, lo cual resulta ser obra de un antiguo villano de Spiderman, el Chacal, que en realidad trabaja con la Reina Araña (Una mujer que viene a ser una suerte de versión femenina de Steve Rogers. Pero honestamente la idea siempre me pareció bastante estúpida) Y, aunque al principio el problema parece ser bastante menor (A punto tal que Peter, en lugar de preocuparse verdaderamente, se pone feliz de que ahora todos son como él), los problemas pronto escalan de nivel cuando los ciudadanos con poderes mutantes comienzan a transformarse en horribles arañas gigantes.
Ya con esa premisa nos damos cuenta de que nos encontramos en la típica historia mediocre, digna de los lápices de Slott, donde los sucesos se tornan uno más ridículo que otro y, para colmo de males, convierte a Peter, una vez más, en una suerte de híbrido entre Iron-Man y un payaso estúpido y sin gracia.
Y es que ese es el gran problema de Slott, no sabe escribir a Spiderman sin humillarlo, denigrarlo o hacerlo quedar como un perfecto inútil. Durante toda su etapa Peter Parker se volvió un idiota que, luego de ser reemplazado por Doc Ock, el Superior Spiderman (Otra de las ideas más estúpidas y bizarras del escritor, donde vuelve a demostrarnos que verdaderamente tiene un fetiche con la idea de tener varios arácnidos pululando de aquí para allá) vuelve y se convierte en una especie de Tony Stark, protagonizando lo que fueron, para mí, los peores comics del arácnido. Honestamente me sorprende sobremanera cómo fue que Marvel lo mantuvo tanto tiempo como guionista principal de Amazing Spiderman, cuando el sujeto demostró su ineptitud y mediocridad en más de una ocasión.
Por supuesto, Spider-Island no iba a ser la excepción y, como climax, Slott nos regala una bizarra trasnformación de La Reina Araña a Araña Gigante, rompiendo completamente toda la lógica de la obra y haciendo que uno se sintiera, de pronto, más cerca de una aventura de los Power Rangers que de una historia de Spiderman. Les juro que leía pensando que en cualquier momento aparecía el Megazord a salvar el día.
A todo esto debemos sumarle el arte de Humberto Ramos que, sencillamente, es HORRIBLE. Yo no entiendo cómo Marvel insiste e insiste con este dibujante. La ecuación es simple: Humberto Ramos dibuja feo. No hay con qué darle. Caras cuadradas, rasgos caricaturescos, desproporciones por doquier y exageraciones anatómicas que, para mí, son incapaces de tolerar. Da la impresión de que Ramos se cortó las manos e intenta dibujar con el muñon.
Resumiendo, nos encontramos ante una historia mediocre de Spiderman, que no suma nada nuevo y que se disuelve entre lo absurdo y lo bizarro, pero ante algo que verdaderamente podemos llamar: El típico trabajito de Dan Slott.
1 Mollito.

viernes, 12 de julio de 2019

Spiderman: Percepciones. - El team-up canadiense con Wolverine y Todd McFarlane.

La Sinopsis: Cuando los rumores de que un bigfoot asesino anda suelto y va dejando cadáveres a su paso, Peter Parker viaja a Canadá en busca de respuestas. Se aliará con el salvaje Lobezno para hacer frente a un viejo enemigo y el superhéroe arácnido descubrirá hasta qué punto esta región inhóspita y fría puede ser peligrosa... ¡todo esto ocurre en la épica saga "Percepciones" de Todd McFarlane!




La Edición:
Entrega nro 2 y tomo nro 27 de La Colección Definitiva de Spiderman
Editorial Salvat

La Reseña o Valoración Personal:
Antes de empezar esta reseña quiero señalar que tengo en mí biblioteca un coleccionable de 6 tomos que comprenden todos los números de la cabecera "Spiderman", creada pura y exclusivamente como patio de juegos de McFarlane. Si alguna vez me hago de tiempo para reseñar más libros de mi colección, continuaré con el trabajo de McFarlane por fuera de lo que se llegue a publicar en este coleccionable de Salvat, así como seguramente agregue más fotos de otras ediciones.
Aclarado eso, pasemos a la reseña.
A veces, en el mundo del comic (y en otros tantos ámbitos), surgen estos autores que parecen nacer con estrella y que, de alguna manera, tienen a las editoriales a sus pies, a tal punto que se les conceden todos los caprichos que puedan tener a pesar de que sus obras estén muy lejos de ser conocidas como "clásicos". Todd McFarlane fue uno de esos autores en Marvel y, en el inicio de los 90's, se le dio la serie de "Spiderman" donde el autor buscó satisfacer sus aspiraciones como autor completo de las aventuras del trepamuros, ya que venía de un éxito rotundo en Amazing Spiderman, donde solo ofició como dibujante. Si bien su primera historia fue Tormento, nosotros pasaremos a reseñar primero Percepciones, ya que vamos a seguir el orden de entregas de la colección de Spiderman de Salvat... al menos, de momento.
Percepciones, pues, se puede definir de una manera bastante básica: Es una historia con una narración exageradamente larga para lo poco que se está costando. Durante cinco entregas (número absurdamente alto para una historia que pudo resolverse en tres entregas) asistimos al enésimo encuentro entre Spiderman yWolverine  en una suerte de thriller policial donde los héroes deben descubrir la identidad de un cruel asesino de niños y limpiar el buen nombre de la bestia Wendigo, que habita en los bosques canadienses.
Demasiado pronto descubrimos que cinco números es demasiado para una historia que peca de volverse increíblemente simple ya que, en el mismo tomo, McFarlane firma también un relato titulado "Máscaras" (Con el Ghost Rider y un demoníaco Hoggoblin como protagonistas) que, aunque de trama sencilla, se perfila mucha más entretenida que la aventura principal, y solo está compuesta por dos números. Así que no nos engañemos, ¿es Percepciones una mejor historia por ser más extensa? Para nada. Lo cierto es que ambas historias acaban siendo bastante intrascendentes.
El problema de McFarlane reside en que parece más interesado en elegir los personajes que va escribir, no por un genuino aporte argumental, sino más bien por qué tan geniales van lucir dibujados en sus historias. Reduce, por ejemplo, a Mary Jane a un paepl absolutamente simplista, pero se asegura de que la pelirroja aparezca en una escena con una sensual ropa interior.
El objetivo final del autor es la batalla y que sus personajes luzcan verdaderamente alucinantes en sus poses heróicas, pero lo irónico es que todo se diluye por lo pobre del guión y, al final, nos encontramos con un producto superficial y vacío.
En Percepciones, McFarlane demuestra que es capaz de crear algo más de lo que ya no has enseñado, pero la saga se alarga demasiado en las explicaciones, hasta un punto en que el relato parece no arrancar de verdad hasta la tercera entrega. Consigue crear una suerte de distracción (y relleno) con la narración periodística, pero acaba por no saber cómo continuar el recurso (Ay, Miller querido, como se te extraña) alargándolo hasta el sin sentido. Se agradece ver a Logan sin escrúpulos y con un carácter más duro del habitual, quien incluso cambia su uniforme marrón por el amarillo.
Si se disfruta del estilo de McFarlane como dibujante (De hecho, yo lo hago) seguro encontrará verdadero deleite visual en casi todas sus páginas. Pero en el fondo la historia no deja de ser un policial bastante simplón, que un poco se desdibuja en una crítica al periodismo sensacionalista que no termina de encajar del todo en el cuerpo de la obra.
Estamos, verdaderamente, ante una historia digna del "Spiderman" de Todd McFarlane.
5 Mollitos.










Spiderman: Entre los Muertos y El Último Asalto. - Mark Millar y, ¿el "Hush" de Spiderman?

La Sinopsis: Entre los Muertos: Alguien ha descubierto la verdadera identidad de Spiderman, ¡y tiene la intención de utilizar la información para destruir todo lo que Peter Parker más quiere! Mientras lucha para proteger a su familia y a sus amigos de la venganza de un loco y misterioso enemigo, el lanzarredes llegará al límite absoluto de su resistencia. ¡Y está peligrosamente cerca de cruzar una línea que se había comprometido a no cruzar!

El Último Asalto: ¡Peter Parker continúa con la búsqueda frenética de su adorada Tia May! Pero la cosa se complica cuando entra en escena Veneno con los mismos poderes que el anterior, pero ningún escrúpulo. Mientras tanto, y a espaldas de todos, una siniestra conspiración toma forma. Quien ha secuestrado a Tia May prepara un plan definitivo para acabar con el trepamuros, ¡con la ayuda de doce de los enemigos más letales de Spiderman!


La Edición:
Entregas nro 1 y 5; tomos nro 44 y 45 de La Colección Definitiva de Spiderman.
Editorial Salvat.

La Reseña o Valoración Personal: Vamos a ponernos en contexto. Marvel Knight fue una cabecera un tanto experimental donde nuestros héroes vivían aventuras que buscaban enfocarse, un poco más, en lectores que podríamos tildar de jóvenes/adultos. Tal vez podríamos decir que era una colección que no tenía el mismo tono de las aventuras Marvel tradicional, pero tampoco llegaban a la oscuridad o seriedad de los relatos de Marvel MAX, enfocados en verdad en lectores adultos.
En el momento en el que esta historia vió la luz, (Allá por el 2004-2005) Strackszynski era el guonista titular de Amazing Spiderman, orquestando una etapa en la que Peter se redescubría a sí mismo como representante de La Araña como elemento totémico del cosmos, y era ayudado por el misterioso personaje de Ezekiel, quien también poseía poderes arácnidos similares a los de nuestro héroe. Lejos estaban aún, los rollos de Civil War y los dramones de One More Day.
Así, en una miniserie de doce números Mark Millar nos brindaba una historia de Spiderman bastante particular. (Pequeño paréntesis para marcar que yo tengo la historia dividida en las doce grapas que supo editar Panini en su momento. Incluso dos de ellas firmadas por el dibujante Frank Cho)
Esta aventura empieza con una premisa por demás desesperante: Luego del millonesimo enfrentamiento de Spiderman con el Duende Verde, a quien vence y manda a prisión, somos testigos de cómo un misterioso personaje secuestra a la Tia May. (Personaje que, además, conoce la identidad secreta de nuestro amigable vecino)
Así, pues, comienza un dramático juego del gato y el ratón en el que Peter Parker, más desesperado que nunca, sigue distintas pistas en busca de su Tía May y del villano desconocido que le está haciendo la vida imposible.
Hasta aquí el argumento puede parecernos bastante simplista, pero Mark Millar sabe llevarlo hasta sus máximas consecuencias, creando una histora de un ritmo trepidante en el que el sufrimiento y la desesperación de Peter parecen contagiarse al lector, que cada vez que pasa las páginas, solo puede desear que se desvele el misterioso final para, así, saciar su curiosidad. Curiosidad que, inevitablemente, se vuelve perversa y morbosa. Además, el autor también nos demuestra su auténtico fanatismo hacia Spiderman y su mundo, ya que por sus páginas pasan una cantidad inimaginable de villanos, entre los que podemos contar a Venom, el Duende Verde, El Buitre, Electro y un largo etcétera, que hace que podamos comparar esta aventura con "Hush", aquella aventura de Batman guionizada por Jeph Loeb y dibujada por Jim Lee. Marvel Knights Spiderman resulta bastante parecida, al menos en espíritu y en lo que nos quiere contar.
Además, el trabajo de Millar encaja perfectamente dentro de la continuidad de la etapa de Strackzynski en Amazing Spiderman. Todo funciona de manera fluida.
Un personaje con un papel bastante destacado en la trama es La Gata Negra, al ser el principal apoyo de Peter en una lucha contra un villano que no conoce y que lo llevará por algunos de los más oscuros caminos que jamás a recorrido el trepamuros.
Millar también nos brinda uno de los momentos más atípicos en la vida de Eddie Brock. Esta es la primera vez en la que Venom cambiaría de huésped por primera vez. En una subasta organizada por un Brock enfermo de cancér que desea cambiar su vida, se ofrece el simbionte al mejor postor. Pero no me parece prudente revelar aquí la nueva identidad de Venom, ya que seguramente muchos querrán leer la historia.
El dibujo corre a cargo de Terry Dodson y Frank Cho, que trabajan con un estilo muy similar, de líneas que pueden parecer rígidas funcionales y que dan cierto tono cartoon a la altura y se ajustan de manera impecable a los guiones de Mark Millar.
Sin duda, este Spiderman de Mark Millar se encuentra entre una de las mejores obras del autor, al menos con personajes que no son suyos, en una historia autoconclusiva que podemos leer de manera independiente a cualquier otra etapa o colección del trepamuros.
8 Mollitos.





Batman: Segundas oportunidades. Parte 1 y 2. - Debut y Carrera de Jason Todd.

La Sinopsis:
Parte 1: Publicado originalmente en Batman núms. 402-403, 408-411 USA, de diciembre de 1986 a septiembre de 1987. Juntos, Batman y Robin han mantenido seguras las calles de Gotham City mientras Dick Grayson, el chico que se oculta bajo la máscara, ha mantenido a Bruce Wayne alejado de una vida llena de sombras. Pero cuando una bala disparada por el arma del Joker por poco le corta definitivamente las alas a Robin, su colaboración se trunca y Batman retoma su lucha contra el crimen en solitario... aunque no por mucho tiempo. Cuando Batman conoce a Jason Todd, el chico es más delincuente que justiciero, pero de ese primer encuentro surge un poderoso nuevo vínculo. El Caballero Oscuro ve el potencial de Jason para convertirse en héroe, así como la rabia y la sed de venganza que tanto lo atormentan.

Parte 2: Publicado originalmente en Batman núms. 412 a 416 USA y Batman Annual núms. 11 USA, de octubre de 1987 a febrero de 1988. Tras terminar su colaboración con el primer Robin, Dick Grayson, Batman ha encontrado a un nuevo Chico Maravilla en la figura del astuto Jason Todd. Sin embargo, aunque Jason demuestra tener un gran potencial para convertirse en héroe, también es un joven con una vida tormentosa, consumido por el resentimiento y la ira. El mayor héroe de Gotham tiene un nuevo Robin, pero ¿conseguirá llevar a su protegido por el buen camino?
Y además Star-Spangled Comics núm. 65 USA.: Publicado originalmente en febrero de 1947. Robin, el Chico Maravilla, lucha contra el crimen en su primera aventura en solitario, titulada Los terroríficos adolescentes.


La Edición:

Tomos 65 y 66 de la colección de la Colección Definitiva de Novelas Gráficas DC
Editorial Salvat.

La Reseña o Valoración Personal:
Tenía muchas ganas de reseñar estos tomos desde que empezamos a hablar de Jason Todd en este Blog. Donde más atención le hemos prestado a este personaje fue en la reseña de la saga Una Muerte en la Familia, donde el segundo Robin encontró su dramático final. Pero nunca hemos hablado de sus aventuras junto a Batman (Salvo una o dos) o, mejor aún, de su origen.
Ahí es donde entran estos tomos de Salvat en los que, no solo asistimos al origen del segundo Robin sino que, además, vemos cómo Dick Grayson (El primer Robin, ahora convertido en Nightwing) procesa todos estos hechos y lima ciertas asperezas con su viejo mentor.
Una de las historias de mayor peso, tanto en estos tomos con en la vida de Batman en general, es aquella donde el Joker consigue herir gravemente a un (bastante adolescente) Dick Grayson. Este sucede fuerza a Batman a tomar una crucial decisión: "Prescinde de los servicios" de Dick como su fiel compañero y da por muerto a la figura de Robin.
Sin embargo, muy poco tiempo después, Bruce encuentra a Jason Todd, un jovén huérfano robándole las llantas de su batmóvil y, en una escena que hoy por hoy es un clásico del comic, (y un acto por demás estúpido e impulsivo. Hay que decirlo todo.) lo recluta para que sea el nuevo Robin.
Muchos fans han encontrado este momento bastante ridículo. No solo de deja ver las evidentes contradicciones en el actuar de Batman, quien se "asusta" luego de que la vida de Dick corriera peligro, siendo que Dick ya era un joven adulto formado y entrenado, pero no duda ni un segundo en reclutar  a un niño inexperto que bordaba entre los 12 y 14 años. También hay que señalar que, desde la lógica interna de los relatos de Batman, es bastante estúpido pensar que un chico como Jason podría robarle las ruedas a un vehículo como el batmóvil, plagado de sistemas de seguridad.
Pero la propia historia tiene una justificación para que las cosas sucedan de esa manera y es bastante destacable, además, lo bien desarrollado que está todo y cómo los hechos van derivando en diferentes consecuencias.
Batman y Jason comparten una aventura que sirve para que generen un vínculo. Batman reconoce que el muchacho tiene bastante aptitudes y recursos y que nunca en la vida volvería a tener una oportunidad como aquella para cambiar su futuro, por lo que decide otorgarle el puesto de Robin. Entre aventuras y entrenamiento, Jason descubre que Dos Caras y su padre han tenido un pasado turbio juntos y, en una suerte de bautismo de fuego, consigue dominar sus instintos y sentimientos, demostrándole a Bruce que es apto para el trabajo, con sus aciertos y errores. Pero debemos ser conscientes de que el carácter y personalidad de Jason Todd en estas aventuras, distan mucho de aquel muchacho rebelde y lleno de ira que se nos presenta en Una Muerte en la Familia. Durante estas historias, todo lo que podemos apreciar es cuan alta dejó la vara Dick Grayson y cómo las decisiones de Batman sobre la figura de Robin le terminarán pasando factura más temprano que tarde.
El guionista principal de estas historias es Max Allan Collins y, aunque es nombre que seguramente no  nos sonará mucho, debemos decir que se preocupa, y mucho, en dar un desarrollo natural y fluído de los acontecimientos. Si bien hay casos e historias que son autoconclusivos, también disfrutamos de subtramas que van avanzando, dotando a las vidas de los vigilantes de Gotham de profundidad e interés.
El retrato de Batman como alguien tan imperfecto, y a la vez tan humano, es realmente un gran logro. Alejado de la "grandilocuencia omnipotente" que muchos guionistas le han atribuido en el último tiempo, aquí podemos ver un retrato del personaje lleno de defectos y que podríamos tildar hasta de egoísta. Cuando Dick Grayson es apartado del puesto de Robin (Hecho que, además, le crea una gran crisis existencial que luego se profundiza en otras historias) Bruce se despreocupa y se desentiende completamente del muchacho. Detrás está el miedo a despedirse y perder a la gente que quiere, y parece importarle muy poco los caminos que su púpilo podría tomar.
Dick se siente bastante perdido hasta la llegada de Los Titanes, donde se convierte en su líder y consigue encauzar su vida. Se habla incluso de sus depresiones, dando una perspectiva realmente buena de cómo Robin a influido en su persona, su existencia y su razón de ser. Todo perfectamente desarrollado.
El carácter fuerte es algo que Dick ha aprendido de Bruce, y se enfrenta a él sin demasiadas vueltas, para pedirle explicaciones. Todo el desarrollo de este enfrentamiento es, sencillamente, brillante. Buce Wayna solo puede esquivar las respuestas y atacar verbalmente a Dick en una escena que, sencillamente, se siente increíblemente real. Como lector, uno consigue empatizar con el chico y entender que pida explicaciones al por qué no podía haber un Robin cuando enseguida acoge a otro. Lo que pide lo pediríamos cualquiera en su caso. Y las evasivas de Bruce también son entendibles. Es, ni más ni menos, una discusión de familia como cualquira que hayamos tenido nosotros.
La resolución encaja con el retrato más certero que se puede leer sobre Batman.
El traspaso del manto (o del bastón presidencial?) de Robin de Dick Grayson a Jason Todd se hace de manera impecable, creando una especie de hermandad entre ambos personajes.
Unas pocas viñetas y unos acertados y certeros diálogos consiguen definir a la figura de Robin de una manera sobresaliente y hasta trágica, alejándolo de todas las parodías que pudieron existir sobre este personaje tan entrañable.

No quiero dejar pasar la oportunidad de reseñar una historia que, en el cúmulo de acontecimientos que componen estos tomos, puede pasar desapercibida. Pero, es una historia de verdadera fuerza emocional y argumental y, debo confesar, una de mis favoritas de Batman.
Estamos hablando de la historia del asesino del vertedero, (Una historia titulada "¡Víctimas!") es una de las entregas más convincetes de las escritas por Jim Starlin. Una trama cruda, desoladora, de culpa, decepción y fracaso, compuestas con tintes un poco ominosos y, ¿por qué no decirlo?, machistas.
La historia empieza con Batman de pie, acechante, sobre una chimenea de la ciudad. La primera frase, la primera viñeta, han de establecer el tono del relato. Starlin refleja la sordidez del crimen, al igual que la tristeza, la soledad y la fragilidad de la vida.
Una partida de ajedréz que el héroe parece incapaz de ganar porque, cuando actúa, la vida ya se ha perdido y solo queda un cuerpo despedazado al que nada le importa. Aquí no se trata de ser más listo, más rápido o más fuerte que el villano de turno. Aquí podemos palpar el cansancio y la desesperación del héroe ante una situación injusta e irreversible. Siempre habrá otra víctima, por otros motivos. Batman sólo puede detener al culpable.
En  este relato Starlin se enfoca en las personas. Entiende que Batman es un ícono y que, por su status quo, no se puede cambiar demasiado de él (O los cambios no pueden ser muy trascendentales). Pero Batman patrulla una ciudad que sí es cambiante. Gotham City está plagada de gente a la que le pasan cosas. En pocas páginas Starlin crea a Kate Babcok, una mujer admirable que solo nació para ser asesinada por un asesino estúpido, sin el "glamour" o las excentricidades de un supervillano, solo un tarado con un cuchillo y su odio. 
Esta historia funciona perfectamente como número autoconclusivo. Debo decir que poco me importa a mí la continuación que este relato supo tener (Starlin se creyó iluminado y buscó darle una suerte desenlace y conclusión a una historia que ya funcionaba de manera perfecta así como estaba) pues no lo leí, ni creo que lo haga.
8 Mollitos para estos tomos que supieron profundizar de manera sobresaliente sobre la historia de Batman y Robin.







miércoles, 3 de julio de 2019

Noveleando: John Katzenbach: El Psicoanalista. - Una thriller de suspenso para terminarlo en el diván.


La Sinopsis: "Feliz aniversario, doctor. Bienvenido al primer día de su muerte." Así comienza el mensaje anónimo que recibe el psicoanalista Frederick Starks, y que le obliga a emplear toda su astucia y rapidez para, en quince días, averiguar quién es el autor de esa amenazadora misiva que promete hacerle la vida imposible.


La Edición:


Mis ejemplares de El Psicoanalista por Ediciones B de bolsillo.

La Reseña o Valoración Personal:
Ya he hablado del bueno de John Katzenbach en este Blog, cuando reseñé la novela "Historia de un Loco". Sabemos, pues, que se trata de uno de los mejores escritores (sino el mejor) de género thriller/suspenso, gozando de una habilidad innata para compartir en best-seller todo lo que escribe.
Hoy nos toca hablar de su más grandiosa obra: El Psicoanalista.
El Dr. Frederick Starks, (Ricky para los amigos) es un analista de la ciudad de New York y un hombre que disfruta de la rutina. A él le gusta la pasividad de sus días y el psicoanálisis freudiano que imparte a sus pacientes. La mayoría de ellos, de buena posición económica. Si bien Ricky extraña a su esposa (Recientemente fallecida luego de una larga enfermedad) En verdad aprecia fuertemente la seguridad y estabilidad de su vida y aún disfruta de su vida en la ciudad y no la cambiaría por nada.
Luego  sucede algo totalmente inesperado: La tranquilidad de Ricky se rompe de manera brusca y sorpresiva. Ricky recibe una misteriosa carta donde un tenebroso y perturbador sujeto le jura que se vengará haber contribuido con la muerte de su madre. Esta carta le presenta al psicoanalista un juego verdaderamente mortal y diabólico. Y Ricky no tiene más remedio que jugar.
Rumpelstiltskin (El autor de la carta y del juego macabro) comparte con Ricky un desafio contrarreloj, en el cual el psicoanalista tendrá un plazo de quince días para desubrir la identidad de este macabro personaje y, si no logra resolver el acertijo, deberá pagarlo con su vida.
Así asistimos a las dos semanas más fatídicas e infernales en la vida de Frederick Starks. A través de dos leales lacayos, Virgil y Merlin, Rumplestiltskin destruye la vida de Ricky en todos sus aspectos: Destruye su reputación, su economía, su hogar, su cordura y todo cuanto alguna vez pudo haberle importado. A su vez Ricky va dando tumbos como un errante, viéndose incapaz de descubrir la verdadera identidad de su torturador.
En un impresionante giro de los acontecimientos el personaje de Ricky consigue desnivelar el juego y, demostrando que la mente humana es un arma por demás poderosa, aprendé rápidamente a moverse en el territorio de su rival. Así, el psicoanalista consigue patear el tablero y, ahora, es la presa la empieza a acehar al cazador.
Lo más destacable de esta historia es la forma en la que el buen Katzenbach demuestra su comprensión de la teoría y las prácticas psicoanáliticas. A través del personaje de Ricky podemos apreciar que el psicoanálisis se trata más de un arte que de una ciencia, y que puede estar llena de fallas como de virtudes.
El autor hace que las acciones y motivaciones de su personaje se ajusten perfectamente al entrenamiento psicoanalítico. Ricky, pues, deberá hacer uso de todo su conocimiento y saber para desentrañar la oscura trama que se ha apoderado de su vida, y deberá aprender, además, a sobrevivir en un mundo de terror y violencia que poco tiene que ver con la rutinaria existencia que solía llevar con tanta soltura en el pasado.
Es verdaderamente admirable la forma en la que John Katzenbach se desenvuelve en el campo del psicoanálisis, moviéndose entre tratamientos y teorías como pez en el agua. Es muy difícil, para un escritor amateur, crear un mundo que gire alrededor de la distinguida de Sigmund Freud, pero Katzenbach en verdad consigue hacer un maravilloso y sobresaliente trabajo.
La única manera de que no te guste este libro (Siempre que te consideres un lector serio) es que no te guste el género de thriller, terror o suspenso. Es que El Psicoanalista es todo eso. Es una historia de verdadero terror y desesperación psicológica. Y es, además, una de las mejores novelas que leí, no solo de este autor, sino también del género. 9 Mollitos.    

































sábado, 27 de abril de 2019

Batman: La Espada de Azrael. - ¡Santos cultos secretos, Batman!

La Sinopsis:Una misteriosa muerte, sucedida en Gotham City, lleva a Batman a investigar y descubrir la existencia de un viejo culto que cuenta con un arma por demás letal y poderosa: El Ángel Vengador Azrael.


La Edición:


Tomo 8 de la colección de Batman editada en su momento por
Planeta DeAgostini.

La Reseña o Valoración Personal:
Debo ser sincero conmigo mismo y admitir que no recordaba que esta historia pudiera ser tan entretenida. A medida que la iba leyendo, sentía que estaba redescubriendo una historia que, me da la sensación, ha sido bastante infravalorada.
Todo comienza cuando la enigmática figura de Azrael aparece en Gotham City para impartir su particular justicia. Pero todo sale horriblmente mal y Azrael, herido de muerte, deambula por las calles de la ciudad hasta llegar al apartamento de su hijo y pasarle la antorcha antes de morir.
Este suceso es lo que lleva a Batman a realizar una exhaustiva investigación y terminar por descubrir que Azrael es, ni más ni menos, un ángel vengador que actúa en nombre de la antiquísima y secreta Orden de San Dumás.
Por su parte, un nuevo Azrael se alza, en la figura del joven Jean Paul Valley, y un nuevo villano se hace presente también. Un millonario de nombre Lehah (Aquel que consiguió matar al primer Azrael al inicio de la historia) entra en una especie de brote psicótico y se convierte en un fiel sirviente del Demonio Biis, comenzando a matar a distintos miembros de la Orden de San Dumás, mientras Batman y Azrael (Cada uno por su cuenta) intentan detenerlo.
Desde los Alpes hasta Texas, la obra despliega acción a raudales y nos ofrece una historia super fluida y entretenida.
Es encomiable y debemos rescatar que, por fin y luego de bastante tiempo, vemos a Batman oficiando de detective. Muchos guionistas consiguen olvidar fácilmente que Batman es, ante todo, un excelente detective. Muchas historias eclipsan este aspecto del personaje para entregarse de lleno a la acción, pero lo cierto es que ver al Murciélago interactuando en una escena del crimen es siempre un deleite.
Otro punto a destacar es lo rápido que Lehah (O Biis) consigue derrotar a Batman y tomarlo prisionero. Claro que de poco le sirve, pues Bruce Wayne tiene mil y un recursos, siempre, y tenerlo de rehén supone más un incordio que una ventaja.
Pero debemos tener en cuenta que aquí el protagonista es Azrael, sobre él recae el gran grueso de la trama y es él quién debe oficiar de héroe (o antihéroe) a la hora de salvar el día.
Siento que el trabajo de autores y guionistas es sencillamente sobresaliente, pero esta saga se vio bastante eclipsada por la magnitud de todo lo que vino después. Hablamos, ni más ni menos, que de La Caída del Murciélago. Esa gran macrosaga que pone en Jaque a Batman y lo hace descender hasta el peor de los infiernos. Además, debemos saber que Azrael (o Jean Paul Valley) tiene un rol fundamental en esta obra por venir. Pero eso ya es motivo de otra reseña.
Por lo pronto 8 Mollitos para esta grandiosa historia.

miércoles, 20 de marzo de 2019

Batman: Un lugar solitario para morir. - Tim Drake, la tercera es la vencida.

La Sinopsis: Luego de los hechos narrados en Una Muerte en la Familia (muerte de Jason Todd, el segundo Robin), DC Comics se siente presionada a crear lo antes posible un nuevo Robin. Dennis O'Neil, el editor en jefe de Batman en aquellos años encarga estas historias a Marv Wolfman; guionista de "The New Titans" (serie en donde participa Dick Grayson, primer Robin y actual Nightwing), y a su equipo, la creación del nuevo personaje.


La Edición:

Tomo número 7 del Coleccionable de
Planeta de Agostini

La Reseña o Valoración Personal:
Tras la muerte de Jason Todd, (segundo Robin) Batman se volvió desprólijo, descuidado y mucho más violento que antes. Como ya vimos en Año Tres (Historia que bien puede servir como prólogo para esta que nos compete en esta reseña), ni siquiera Nightwing es capaz de seguirle el tren y tratar de calmar las frustraciones de su antiguo maestro.
Pero claro, ni Nightwing, ni Alfred y mucho menos el mismo Bruce podían imaginarse que, más pronto que tarde, un nuevo Robin entraría en escena y, esta vez, sería el definitivo. Al menos por un tiempo bastante largo.
Mientras Batman se dedica a cazar criminales de manera sanguinaria, es estudiado por una misteriosa figura que parece conocer todos sus secretos. Y no solo los referentes a Bruce Wayne, sino también a Dick Grayson. Claro, no tiene sentido mantener el misterio. Por supuesto que este personaje, que se dedica a espiar por buena parte de la trama, no es otro que Tim Drake, el tercer Robin.
Pero, sin apresurarnos demasiado, descubrimos que el principal motor motivante del joven Tim es la preocupación que siente por el actuar errático de Batman. Según él Batman no puede actuar sin Robin, y debemos reconocer que su teoría no esta tan errada.
Batman nació como un vigilante solitario que se enfrentaba a sus enemigos, literalmente, con sus mismas armas. Esto es cierto, en sus primerísimas aventuras, Batman se daba de tiroteos con los criminales, e incluso llegó a matar a más de uno. No se supo muy bien cuándo fue que Batman abandonó las armas, pero sí que fue luego de la introducción de Robin como personaje. Batman necesita a Robin, pues este le actúa como un clave a tierra. El personaje sirve para que el murcielago pueda exteriorizar todos sus pensamientos y, de esta forma, lograr una mayor conexión con el lector.
Así como, antiguamente, nos enterabamos de las imposibles conexiones de la mente de Sherlock Holmes a través del personaje de Watson, Robin vendría a representar en el mundo de Batman una figura similar. Un personaje que le requiere al murcielago bajar un cambio y conectar con el mundo real, sin perderse en el oscuro sendero que le supone ser Batman.
Por supuesto, los guionistas han ido profundizando en las figuras de Batman y Robin, a veces con suerte y a veces no. Pero siempre buscando nutrir el mito.
Por supuesto Batman ha sabido y aún sabe tener aventuras en solitario, pero Robin siempre será parte de su universo.
Con esa idea en mente es que el guionista Marv Wolfman nos presenta al joven Tim Drake en esta historia aunque, debo decir, la introducción del personaje no deja de ser una seguidilla de conveniencias y casualidades. Casualmente Tim Drake conoció a Dick Grayson la noche en que este último perdió a sus padres (Recordemos Año Tres) y desde ese día, solo pudo sentir admiración, además el accidente y la presencia de Batman hizo que esa noche sea por demás inolvidable.
La mente de Tim quedó tan marcada por los sucesos de esa noche que, cuando vio por primera vez a Batman y Robin en televisión, en un flashback informativo, de una manera muy conveniente descubre que Dick Grayson es el joven maravilla, no solo por el traje (el cual era casi un calco de su uniforme del circo) sino por una acrobacia bastante particular que solo Dick era capaz de realizar.
Así pues, si Dick Grayson fue acogido por Bruce Wayne y, poco después, se lo ve actuando con Batman, no cabe duda de que el playboy millonario debe ser el cruzado enmascarado.
Pero la mente de Tim no se detuvo allí, no señor. Luego de un tiempo de que saliera a la luz que Bruce Wayne había adoptado a Jason Todd, a Batman se lo vio actuando nuevamente con Robin. Luego de que el fallecimiento de Jason Todd tomara cierto conocimiento público, Batman volvió a actuar solo. No sabemos con exactitud si Marv Wolfman dotó a Tim Drake de una inteligencia y una deducción casi sobre-humana, pero lo cierto es que el muchacho llevó a cabo todas estas conexiones y deducciones de una manera tan natural que uno realmente se preocupa por el trabajo de los guionistas anteriores que parece que no fueron capaces de tapar agujeros que los terminó descubriendo un niño de unos once años.
Lo cierto es que esta historia la leí hace muchísimo tiempo y no me acordaba de muchas cosas. Me había olvidado de unos cuantos detalles y, además, mi mente tenía a esta historia en mejor estima.
Ojo, no quiero decir que la historia sea mala, de hecho no lo es. Marv Wolfman y George Perez nos ofrecen un trabajo entretenido, dinámico, lleno de acción y de una emoción que ya quisieran para sí muchas obras de hoy día. Pero al mismo tiempo debemos decir que el personaje de Tim Drake no termina de sentirse del todo "real".
Todos sabemos que al final se termina convirtiendo en el mejor Robin de todos, eso no tiene mayor discusión (O tal vez sí, no sé, para mí es el mejor Robin) pero su primera aparición no deja de ser demasiado increíble y su manera de descubrir las identidades de Batman y Robin es demasiada conveniente y fantástica, incluso para una historia de Batman.
6 Mollitos.















martes, 12 de marzo de 2019

Batman: Año Tres. - Los Cuadernos de la Corrupción Zucco.

La Sinopsis:
La muerte de Jason Todd ha afectado profundamente a Batman, cuyos métodos se han vuelto más expeditivos que nunca. Una visita a la batcueva sirve como excusa para repasar los orígenes de Dick Grayson, el primer Chico Maravilla, y las circunstancias en que murieron sus padres. Mientras tanto, contacta con los Nuevos Titanes un muchacho llamado Tim Drake que tal vez sepa más de lo que debería...

 La Edición:


Tomo Sexto del Coleccionable de Batman de
Planeta de Agostini.

La Sinopsis o Valoración Personal: Tengo que admitir que mis recuerdos de Año Tres no eran demasiado buenos. No sé porque, pero recordaba a esta historia bastante flojita y hasta algo aburrido. Bueno, lo cierto es que mi recuerdos estaban por demás equivocados. Muy equivocados.
Año Tres no es solo una historia que intenta aprovecharse del tirón que dan estos títulos desde el mítico Año Uno de Frank Miller, sino que, además, es una tesis que defiende con creces la idea de por qué Batman debe tener siempre un Robin a su alrededor.
La historia nos sitúa momentos después de Una Muerte en la Familia, Batman parece negado a la muerte de Jason Todd... bueno, más que negado hace de cuenta como que nunca existió. Las fotografías, los trajes y cualquier referencia sobre el segundo Robin han desaparecido tanto de la Baticueva como de la Mansion Wayne y no solo eso, el actuar de Batman es violento, errático y casi suicida.
A todo esto, en Gotham comienzan a suceder misteriosos asesinatos de diferentes jefes mafiosos y Batman, cansado de llegar siempre tarde, decide aliarse con las figuras más bajas y sucias de la ciudad con tal de dar con el asesino. La estrategia es bastante similar a la que ya usara en Año Dos, cuando decide unir fuerzas con distintos mafiosos, y con Joe Chill, para detener al Segador, solo que, dentro de esta historia, la decisión parece mucho más lógica y acertada.
Por su parte, Alfred también se anda con problemas y complicaciones: Por un lado, se comunica con Nightwing (Dick Grayson, el primer Robin) para que trate de ayudar a Bruce, y por el otro se ve en la obligación de impedir la temprana liberación del jefe mafioso Anthony Zucco. Pero, ¿Quién es este Zucco que hace que Alfred se tome tantas molestias para mantenerlo en prisión o, en su defecto, lejos de Bruce? Pues es nada más ni nada menos que el asesino de los Grayson Voladores, los padres de Dick.
A través del relato de Alfred vamos tomando conocimiento de la tragedia del circo, de cómo Bruce acogió a un jovencisimo Dick por el cual sintió, inmediatamente, una sincera empatía, y cómo lo terminó entrenando para convertirlo en su fiel compañero en la lucha contra el crimen. 
A su vez, conocemos de Zucco y su complicado crecimiento, como poco a poco fue involucrándose más y más en la mafia y los negocios turbios, haciéndose un nombre a través de un hecho bastante curioso: Zucco anotaba todos los movimientos ilegales y los nombres turbios en un cuaderno, con fechas, nombres y lugares exactos.
Al principio nadie parecía darle demasiada importancia a ello. Todos pensaban que Zucco era solo un muchacho aplicado. Pero, con el paso del tiempo, el cuaderno se convirtió en un arma letal, pues Zucco tenía, literalmente, los trapitos sucios de todos y planeaba hacerse cargo del control completo del crimen de Gotham.
Lo que Zucco no pudo saber es que él también fue traicionado, y finalmente Batman y Nightwing consiguen ponerle fin a la ola de asesinatos mafiosos.
Sin solucionar sus problemas de fondo, a lo largo de la aventura Batman reconoce que su comportamiento es demasiado salvaje y desprolijo, pero su orgullo no le permite abrirse del todo a Nightwing, pues este conflicto, este duelo que Bruce atraviesa por la muerte de su aliado termina de detonar en la siguiente historia que, de cierta forma, complementa esta aventura: Un lugar solitario para morir.
Marv Wolfman nos ofrece en Año Tres una historia dinámica y entretenida, pero el dibujo de Pat Broderick es algo bastante irregular, consigue viñetas increíbles y bellísimas, pero das vuelta la página y, de pronto, el dibujo es horroroso, haciendo que la calidad final del trabajo sea algo bastante irregular.
7 Mollitos para esta aventura.






sábado, 23 de febrero de 2019

Batman: Una muerte en la familia. - La democrática muerte de Jason Todd.

La Sinopsis:
En los años ochenta, un cambio crucial sacudió la mitología de Batman: el primer Robin, Dick Grayson, abandonó al héroe para convertirse en Nightwing, pero otro Chico Maravilla le relevó. ¿Quién era Jason Todd? El destino de ese segundo Robin, más impulsivo y violento, sería decisión de los propios lectores: si llamaban a un número de teléfono, Jason viviría, pero si llamaban a otro...

La Edición:
Tomo quinto del Coleccionable de Batman de la Editorial
Planeta de Agostini.

La Reseña o Valoración Personal:
Es muy posible que esta obraa se encuentre entre las historias más dramáticas en toda la carrera de Batman. Fue, sin duda, un momento que marcó un antes y un después en la carrera del Caballero Oscuro y sus consecuencias siguen haciéndose eco, inclusive, hasta el día de hoy.
Hay que decirlo, a pesar de que ciertos momentos de la historia pueden parecernos un tanto ridículas hoy en día, el climax de la obra sigue sintiendose como algo verdaderamente escalofriante.
En un análisis que se puede prestar a mucho debate, podríamos decir que la muerte de Jason Todd (el segundo Robin) puede considerarse como el primer paso a la caída en decadencia del Hombre Murciélago que alcanzaría sus horas más oscuras en la saga "La Caída del Murciélago". Pero aún nos falta bastante camino, vayamos despacio.
Una Muerte en la Familia es una historia orquestada por Jim Starlin, con Jim Aparo en los dibujos. En ella, asistimos a los últimos momentos de vida de Jason Todd, el segundo Robin, quien encuentra su horrible final a manos del Joker, mientras se sucedía una encarnizada búsqueda por su madre biológicia, en una aventura que lo trasladará hasta Oriente Medio.
Una vez leí que Starlin tenía la creencia de que Robin no debía ser el compañero de Batman. Algo así como que la cruzada del encapotado perdía seriedad y oscuridad si, de pronto, un niño de menos de catorce años aparecía por ahí, en un traje colorido, soltando ocurrencias mientras se peleaba con la escoria de Gotham.
A esto sumemosle el hecho de que Jason Todd no era un personaje que, por ese momento, sumase demasiados seguidores con su particular carisma.
Jason era la antitesis de Dick Grayson. Sobreviviendo en las calles luego de que su madre muera y su padre terminara en prisión, Batman encontró a Jason Todd robándole las ruedas del batimovil y, en un acto impulsivo, decidió acogerlo y convertirlo en el nuevo Robin.
Pero pronto los lectores descubrirían que Jason solo era igual a Dick en el traje. Ya que este segundo Robin era mucho más rebelde y salvaje que su antecesor, y sus actos estaban todo al tiempo al limite. De hecho, todo terminó de desbarrancar luego de un polémico momento que Jason tuvo con un diplomático, nunca terminó de quedar claro para Batman que fue lo que sucedió, pero lo más evidente fue que, en ese momento, Robin empujó a este corrupto diplomático por el balcón, asesinándolo, y luego excusándose con su mentor, diciéndole que el hombre solo "resbaló". Robin estaba totalmente descontrolado, y alguien debía hacer algo al respecto.
Así fue como se puso en movimiento nuestra historia. El Joker dejó a Robin en un situación compremetedora, de vida o muerte, y era los lectores quienes debían decidir su destino, a través de una votación que se realizaba por llamado telefónico. Y, aunque la votación estuve bastante pareja, esta democrática táctica decidió que Jason Todd debía morir.
Esta es la primera vez, a lo largo de estas historias, donde vemos a Batman confuso, lleno de culpa y dudando de sí mismo. Starlin consiguió humanizar al personaje de una manera tal que casi podemos sufrir junto a el ante la dificultad de las decisiones que debe tomar.
Jason Todd se embarca en un viaje de descubrimiento, al tiempo que se decide a buscar a su madre bilógica, quien descubre que siempre estuvo viva. Al mismo tiempo, el Joker se escapa de Arkham y, al ver sus bienes y dinero confiscados, decide vender armas nucleares a Oriente Medio. Su turbio negocio hace que, una vez, vuelva a cruzar camino con Batman y Robin, con consecuencias fatales para este último.
Si bien toda esta trama continua siendo super interesante y entretenida, a la vez que final de Jason Todd continua tan trágico y dramático como la primera vez, lo cierto es que el giro argumental de esta historia es bastante bizarro y delirante.
El Joker, temeroso de las represalias que pudiera tomar Batman, se convierte en un embajador iraní con inmunidad diplomática, e incluso logra llegar a la ONU donde, lógicamente, intenta matar a todos y es detenido por Batman y Superman, pero finalmente logra escapar. La sola idea del Joker como un embajador que, incluso, es tomado en serio por la ONU y por otros diplomáticos es, sencillamente, ridícula. Batman no puede más que observar a su más peligroso enemigo en el estrado de una de las instituciones mundiales más importantes de todos los tiempos con ojos impotentes, mientras nosotros, como lectores, nos preguntamos cómo es que Starlin fue capaz de escribir semejante momento bizarro y ridículo. Por suerte no consigue manchar el cuadro general de la historia.
Luego tenemos a Jim Aparo quien, definitivamente, debería ocupar el Olimpo de los dibujantes definitivos de Batman junto a Neal Adams y el inmortal Norm Breyfogle.
Todos sabemos que, al final, Jason Todd termina voviendo y se convierte en el justiciero conocido como Red Hood, un vigilante con un enfoque un tanto diferente al de su antiguo mejor. De esta forma podríamos pensar que su muerte un poco se vanalizó. Sí, es posible. Pero el impacto de su muerte continua golpeando incluso en los nuevos lectores. Sabes que, en una epoca no demasiado lejana, Robin murió por decisión de la gente, quien hizo uso de la democracia, continua siendo muy impactante.
7 Mollitos.










miércoles, 20 de febrero de 2019

Batman: Las Diez Noches de la Bestia. - Una aventura del Hombre Murciélago como Dios manda.

La Sinopsis: 
En los últimos estertores del imperio soviético, un agente ruso renegado, únicamente conocido como la KGBestia, llega a Gotham. Su misión: asesinar a 10 personas de importancia crucial para el éxito del sistema denominado “la guerra de las galaxias”. ¿Puede incluso alguien como el Caballero Oscuro detener a esta inhumana máquina de matar?



 La Edición:
Cuarto tomo del Coleccionable de Batman de editorial
Planeta De Agostini.
La Reseña o Valoración Personal:
Generalmente (y más aún en los tiempos que corren) asociamos el nombre de Jim Starlin con Marvel Comics. Y, más específicamente, con todo el dramón intergaláctico que Marvel sabe tener y que Starling ha construído, y sigue construyendo al día de hoy. Por supuesto, si hablamos del costado intergaláctico de Marvel y, para colmo, nombramos a Starlin, es obvio que vamos a estar hablando de Thanos, el titán loco.
Thanos no solo es creación de Starlin, sino que ha sabido ser el protagonista de una trilogía (que empezó relativamente bien y fue cayendo en horrenda decadencia) del "Infinito", teniendo su punto fuerte en Infinity Gauntlet, que ya hemos reseñado en este blog.
Hoy por hoy, y gracias a las películas de Marvel Studios, todo el mundo conoce a Thanos y los comics intergalácticos de Starlin volvieron a ser populares. (En este caso las películas hicieron un milagro, pues salvando Infinity Gauntlet, el resto no es la gran cosa) Seguro que más de un fanático de las películas agarrá un comic de los 70's u 80's y se quiere pegar un tiro por no encontrar a su amado Robert Downey Jr. entre viñetas pero, bueno, esa ya es otra historia.
Lo cierto es que es este pulido guionista ha sabido tener una buena vida entre las aventuras de Batman y, esta historia que hoy nos compete, es una buena prueba de ello.
Las diez noches de la Bestia no solo es una historia que ha envejecido de una manera excelente, sino que, además es el ejemplo perfecto de la cultura y el marco histórico de la época. Eran finales de los 80's y la Guerra Fría estaba llegando a su fin, pero aún podíamos disfrutar de cosas como Rocky IV, o esta historia del encapotado donde, evidentemente, los rusos eran los villanos.
Y otra cuestión de la época que debemos remarcar es la tremenda libertad creativa con la que contaban los autores. Me atrevo a decir que el final de esta obra, de haberse escrito hoy, rompía Twitter y hacía que más de uno se rasgara las vestiduras, con gritos descarnados y demás. Hoy por hoy, a Tom King jamás se le ocurriría aquello que Starlin escribió hace ya unos cuantos años.
La KGBestia un terrible terrorista y asesino ruso, que más bien parece una imparable máquina de matar, arriba a Gotham City para matar a todos los miembros participantes de un proyecto armamentístico supersecreto llamado "Guerra de las Galaxias". Ni bien pone un pie en Gotham, este terrible hombre ya mata a cuatro de los diez nombres de su lista de objetivos (De verdad. Ni el lector ni Batman parecen darse cuenta) y, durante un período de diez días, la Bestia pone en jaque a Batman, frustrando todos sus planes para detenerlo.
Esta es la primera vez que vemos a Batman en una evidente desventaja, en todo momento. La KGBestia parece ir un paso adelante en todo momento. Es más, a lo largo de la obra, Batman y la Bestia tienen unas cuantas batallas y ¡Batman las pierde todas!
La KGBestia es tan superior a Batman en todo momento que este no puede evitar mirarlo con impresión, y casi que con un poco de miedo también.
La obra es trepídante y esta repleta de acción, la historia no para en ningún momento, y su ritmo frenético no hace más que aumentar a cada momento, casi en sintonía con la crudeza de los enfrentamientos entre los dos adversarios. La historia en sí tiene de todo en materia de acción: Persecuciones en los tejados, feroces combates cuerpo a cuerpo, situaciones límites cargadas de tensión, dardos, cuchillazos, balas, hachas... Bueno, deteniéndonos aquí un momento, debemos remarcar algo que no deja de ser un mero detalle, pero en el que solo recaí luego de una segunda lectura. En un momento de la historia, Batman consigue atrapar a la Bestia y le ata una cuerda a uno de sus brazos. La Bestia, en un puro ataque de frenesí violento, y demostrándole a Batman que está dispuesto a hacer cualquier cosa, toma un hacha y se corta la mano, para liberarse de sus ataduras y de su captor, mientras Batman cae, incrédulo, al vacío.
Digamos que la KGBestia podía tranquilamente cortar la soga, sin necesidad de cortarse la mano, y se hubiera liberado igual pero, como hemos dicho, son solo detalles.
El combate final entre ambos titanes se da en las alcantarillas, donde la Bestia se encierra sola en un cuarto y, confiado y seguro de sí mismo, reta a Batman a un duelo final. Pero nuestro héroe, quien reconoce que ya no necesita probarle nada a nadie, ni a sí mismo, rechaza la invitación de su enemigo y, sin demasiados problemas, lo encierra en ese cuarto sin ventanas ni respiración, y traba la puerta para que a la Bestia le sea imposible salir. Básicamente lo deja morir. Sí, lo sé, no lo mata indirectamente pero lo deja en una situación donde no parece haber otro desenlace posible. Y lo hace sin sentir un ápice de culpa. De hecho, lo hace pregonando un acto de madurez de su parte, pues él mismo dice que, en otros años, hubiera aceptado el combate con la KGBestia sin problemas, solo que ahora prefiere elegir sus batallas. Podríamos decir que Batman mata indirectamente a su enemigo al no dejarle demasiadas opciones de sobrevivencia. Supongo que ese tipo de acciones sí lo contempla su código moral, ¿no?
Mención especial a los dibujos de Jim Aparo, quien nos ofrece un Batman potente y con el más puro estilo clásico, emulando al mejor Neal Adams.
Las Diez Noches de la Bestia es una historia increíble, trepidante y desbordante de acción. Se lleva así 9 Mollitos. De lo mejor que le leí al querido Starlin.












martes, 19 de febrero de 2019

Batman: Se cierra el círculo o Círculo Mortal. - El regreso del infame Segador, de una forma inesperada.

La Sinopsis: El Segador ha vuelto. El terrible villano presentado en BATMAN: AÑO DOS ha regresado de la tumba para esparcir amenaza y locura sobre Gotham City. Para impedir que el terror del Segador se extienda, Batman debe enfrentarse al secreto del asesinato de sus padres... arriesgándose a perder su propia cordura.


La Edición:
Tercer Tomo del Coleccionable de la Editorial
Planeta DeAgostini.
La Reseña o Valoración Personal: El día de hoy, y siguiendo el orden que nos hemos autoimpuesto para organizar, no solo mi colección personal, sino también las aventuras de Batman, nos topamos con una historia que podríamos calificar de "difícil". ¿Por qué usamos esa palabra? Bueno, por lo pronto porque, como su nombre bien lo indica, vendría aquí a cerrar el fatal círculo que abrió el cruel Segador.
La historia en cuestión se ubica en un tiempo bastante posterior a Año Dos. De hecho, Batman ya ha reclutado a Robin (un jovencisímo Dick Grayson) quien lo acompaña en sus patrullas. Es en este contexto en el que El Segador vuelve a aparecer, cobrándose sus primeras víctimas.
Pronto descubrimos que nos encontramos, evidentemente, ante un impostor,  pues enseguida descubrimos que la identidad bajo la máscara del reaparecido Segador es la de Joey Chill, hijo de quien haya sido el asesino de los padres de Bruce Wayne quien, junto a su hermana Marcia, disponen de un intricado plan para vengarse del Hombre Murciélago.
Así esta pareja de hermanos se hacen con el antiguo disfraz del fallecido vigilante/villano (Depende cómo se mire) y empiezan a atormentar a Batman de una manera, más bien, psicológica.
Esta historia trata también (o al menos lo intenta) sobre el pase generacional. No solo vemos el resentimiento de los hijos de Chill, quiénes creen que Batman mató a su padre, sino que también tenemos a Robin, un joven que busca constantemente la aprobación de su mentor, y tenemos al pequeño hijo de Joey Chill, el nieto de Joe Chill, quien ve en su padre a una especie de héroe, desbordándose de orgullo y admiración.
Es en medio de este alboroto cuando Bruce se encuentra nuevamente con Rachel Caspian, quien vuelve a la ciudad creyendo que tal vez su padre podría continuar vivo, pero poco espacio da esta historia para cualquier tipo de romanticismo. En este caso ni fuego hubo, ni cenizas quedaron.
Además, Rachel se expone al peligro a propósito, tentando al Segador, pues cree que este aún es el difunto Judson Caspian, su padre. Precisamente por esto Rachel cae prisionera de los hermanos Chill, haciendo que Batman caiga inevitablemente en una trampa mortal. Allí, además de poner en peligro su vida, el encapotado deberá resistir una cruel tortura psicológica, a través de la cual se ve obligado a repetir la muerte de sus padres una y otra vez. Joey Chill hizo uso de toda su astucia y recursos para elaborar un intrincado plan y, usando todos sus conocimientos acerca del Hombre Murciélago, minar sus facultades mentales y empujarlo al sucidio. Y, de hecho, resulta que Chill sabe mucho de Batman, pues fue un testigo directo de los acontecimientos de Año Dos.
Como una especie de espía, Chill hijo había seguido a Batman y a Joe Chill mientras estos cazaban al Segador original. Incluso Joey presenció los últimos momentos de vida de su padre, escuchó todo lo que Bruce le confesó y hasta fue un testigo privilegiado del último combate entre Batman y el Segador. Hasta se tomó la libertad de recuperar el antiguo revolver de su padre, del que Batman se había deshecho al final de la historia. Es Robin quien consigue salvar a Batman, esta vez. Marcia Chill encuentra su merecido final, luego de intentar traicionar a su hermano y este, a su vez es derrotado por Batman.
Aquí sucede algo muy curioso y digno de destacar, pues estamos hablando de Batman, un héroe que siempre ha contado con un código moral muy estricto de no matar. Bueno, no siempre tuvo este código pero esa es otra historia. Lo cierto es que aquí Batman estaba más que decidido a matar a Joey Chill, y no solo eso, Robin lo instaba a que lo haga. El criminal solo salvó su vida gracias a su hijo, pues Batman le preguntó, literalmente, si su padre merecía vivir o morir. Una actitud un tanto extraña en esta figura heroica que es Batman y, si bien no enturbia la trama, es cuanto menos curioso.
Como dijimos al inicio, Mike W. Barr. nos presentó una historia difícil, pues debía cerrar muchos cabos, pero aún así muy fluida y, me atrevo a decir, más entretenida y coherente que Año Dos. Dentro de este mundo ficticio, uno espera que los personajes actuen con cierta lógica interna que haga que nos creamos los eventos que están sucediendo, y las cosas que estamos leyendo. Esto es algo que no sucedía en Año Dos, donde los personajes (Sobre todo Batman) solo hacían cosas estúpidas y contrarias a su personalidad.
Es de destacar que, por las consecuencias que se desprenden directamente del evento de DC Hora Cero, esta historia de Batman parece también haber caído al limbo, sin saber muy bien qué tan afuera de continuidad quedó. Como ya lo mencionamos en la reseña de Año Dos, si Joe Chill ya no existe en el canón del Hombre Murciélago, es bastante lógico pensar que sus hijos tampoco. 
Esta historia supone, además, una nueva oportunidad para Alan Davis de trabajar en estos grandiosos personajes y quitarnos el gusto a poco que nos dejó en Año Dos, tras su prematura partida. Aquí cumple con creces y nos brinda un trabajo espectacular. Ya solo por sus increíbles lápices la historia vale totalmente la pena.
7 Mollitos para esta historia que supone el fin del siniestro Segador. Un villano que jamás volvió a aparecer en la vida de Batman, (Sin contar su participación en la película animada Batman: La máscara del Fantasma) teniendo en cuenta que, en los comics, todos terminan volviendo, tarde o temprano, el Segador parece haberse convertido en la excepción a esa regla.







lunes, 18 de febrero de 2019

Batman: Año Dos. - Las noches del Segador.

La Sinopsis: Con la opinión pública de Gotham recelosa ante la permisividad mostrada por el Comisario James Gordon hacia Batman, la ciudad asiste al regreso de un viejo conocido: El Segador, encapuchado que no duda en matar a criminales para imponer su propia noción de justicia. Ante una situación desesperada, el álter ego de Bruce Wayne se verá obligado a tomar medidas drásticas… ¿y colaborar con el asesino de sus padres? Siguiendo la senda trazada por Frank Miller y David Mazzucchelli, Mike W. Barr y Alan Davis desarrollaron la secuela de Batman: Año uno, en la que fantasmas del pasado acechan al Hombre Murciélago.


La Edición:
Segundo Tomo del Coleccionable de Batman de la Editorial
Planeta deAgostini.
La Reseña o Valoración Personal: Leí por ahí, no hace mucho, que el guionista de esta historia -Mike W. Barr. - había apostado a que el tono de su etapa en las historias de Batman sean un poco más lígeros y que apostaran más a la diversión. Más o menos como solía ser todo antes. Los tonos de las aventuras que vivían el Caballero Oscuro no eran precisamente tan "oscuras", sino que más bien se perfilaban divertidas.
Tal vez ese contexto tampoco le ayudó mucho a esta obra, se puede notar perfectamente que se priorizó la acción y la diversión por sobre la calidad de la obra, y es por eso que Batman: Año Dos parece convertirse en una especie de obra fallida.
La premisa en sí ya parte con ideas bastante pretenciosas: Escribir la continuación de la genial e inigualable (Nunca mejor dicho) Batman: Año Uno. Con esa idea en mente Mike W. Barr empieza a trabajar en la historia, primero con Alan Davis en los lápices y luego con Todd Mcfarlane (Hasta la mezcla de dibujantes es bizarra) y escriben una aventura que, a mí criterio, contiene más falencias que aciertos.
Año Dos empieza con una Gotham City que ya tiene como guardianes a unos experimentados (algo, es el segundo año para ambos) Batman y Gordon como guardianes y defensores. Ambos combaten el crimen con sus métodos y han formado una alianza que, con el tiempo, se ha devenido en una amistad. Incluso aquí descubrimos que Batman fue quien le regaló a Gordon su característica pipa.
Todo parece marchar en relativa calma, hasta que El Segador llega a la cudad. O, mejor dicho, vuelve a la ciudad.
¿Qué hay de especial en este personaje? El Segador es un antiguo vigilante de Gotham, que velaba por las calles de la ciudad antes de que Batman siquiera existiera. Pero sus métodos eran muchísimo más violentos que las del Hombre Murciélago, ya que a este antiguo vigilante no le temblaba el pulso a la hora de matar a los criminales. Y no se limitaba solo a criminales: Policias, prostitutas, políticos corruptos y todo aquel que se podía considerar impuro o pecador, debía temer al Segador.
Con la llegada de este nuevo e intrigante villano la vida de Batman parece ocuparse por completo, pero la vida de Bruce Wayne también sufre un cambio radical, aunque de otras caractéristicas. En una visita a la doctora Leslie Thopkims, (Mujer que encontró a Bruce la noche que asesinaron a sus padres y que ayudó a criarlo junto a Alfred) Bruce conoce a Rachel Caspian y, como no, cae profundamente enamorado.
A partir de aquí es donde empiezan los problemas de esta historia, y son problemas realmente evidentes.
Batman se enfrenta, finalmente, al Segador y recibe la peor paliza de su vida. Vuelve a la Mansión Wayne medio muerto y Alfred y Leslie consiguen salvarle la vida. De vuelta a sus cabales (O eso creemos) Bruce admite que nunca luchó con nadie como El Segador, que estaba totalmente seguro de que sus métodos no servirían y que debería probar un nuevo enfoque. Acto seguido se dirige a su estudio y, corriendo un cuadro de sus padres (bastante feo, hay que decirlo) toma el revolver que había sido del ladrón que, años atrás, lo hubiera dejado huerfano. La incoherencia se hace notoria y evidente, y la estupides de la escena no puede más que desencajarnos el rostro en una sorpresa bastante atípica. ¿Batman con un arma? ¿Batman, que se juró que jamás en la vida utilizaría un arma, ahora anda con un revolver de aquí para allá? Peor aún, ¡es el revolver que le quitó la vida a sus padres! La escena en sí es impensable, inconcebible. Solo contribuye a la decadencia de la obra que, a partir del segundo número, solo sabe ir cuesta abajo.
Batman sube la apuesta de sus bizarras decisiones y no solo carga un arma, sino que decide distanciarse de Gordon y de la policia de Gotham, y unir fuerzas con los peores criminales de los bajos fondos de Gotham porque, según él, "es la única forma de detener a la amenaza del Segador". Peor aún, no contento con destrozar su imagen y su reputación, Batman se alía con el mismísimo Joe Chill, sí. ¡Joe Chill! ¡Aquel nefasto ladrón que, años atrás, le quitó la vida a sus padres! ¡Aquel hombre que, sin saberlo ni esperarlo, creó a Batman! Un sujeto que debería ganarse solo su odio y desprecio eterno ahora es su socio en la lucha contra el crimen y van de acá para allá, saltando entre edificios y buscando pistas sobre El Segador.
Recapitulando, la memoria de sus padres y el origen y la base de su cruzada poco parece importarle a Batman que, no solo anda con el hombre que mató a sus padres, cargando el arma que mató a sus padres, sino que también intercambian ocurrencias y hasta chistes. Por supuesto, con Batman repitiéndose todo el tiempo que es "lo que debe hacerse" o que es "la única forma de detener al Segador". Y lo cierto es que no, lo mismo que Batman hace con los delicuentes podría hacerlo trabajando con la policía y con Gordon, pero de esa forma tal vez la historia no duraría cuatro números.
Cuestión que, y debemos mencionarlo, la identidad del Segador se nos revela casi de inmediato, y se trata de Judson Caspian, padre de Rachel, la recién aparecida mujer que terminó robándose el corazón de Bruce.
Rachel, primero reacia, rechaza las constantes invitaciones de Bruce a salir, y se refugía en una excusa que podría haber sido prometedora, pero que la manejaron de forma horrenda y apresurada, casí como toda la historia de amor en sí. Rachel Caspian era una novicia con un pie en el convento, a nada de ser monja. Pero un día caminó con Bruce por una plaza y, luego de tres cuadritos y cuatro viñetas, se olvidó por completo de sus votos y su vocación y se entregó al amor.
Lo mismo sucede con Bruce, solo que se manejó de una manera tan errada que, durante toda la historia, Batman y Bruce parecen personajes totalmente diferentes. Bruce muestra dudas sobre su cruzada, enamorándose cada día más de Rachel, mientras que Batman está super decidido a acabar con el Segador, sin importarle nada trabajar con criminales y asesinos, disparando armas por ahí. No hay una coherencia en sus actitudes, Batman no parece tener las dudas de Bruce, ni Bruce parece tener las certezas de Batman. Es como si trabajaran completamente por separado.
El climax de la obra se da cuando, luego de una fugaz pelea, Batman y Joe Chill dan por muerto al Segador. Entonces Bruce decide revelarse ante Joe, contarle cómo fue que asesinó a sus padres aquella fatídica noche y después matarlo. Nunca lograremos saber si Batman iba a ser capaz de cruzar la línea pues, en medio de la revelación, El Segador vuelve a aparecer y mata a Joe Chill de un disparó en la cabeza, para luego ser derrotado en combate por Batman, cayendo desde un piso cuarenta y encontrando la muerte. Como si se tratara de un final casi poético (No lo es, es bastante estúpido) Batman decide enterrar la pistola que acabó con la vida de sus padres, en los cimientos de un edificio construido para honrar su memoria.
Al enterarse que su padre era el cruel y sanguinario vigilante conocido como El Segador, Rachel Caspian ve su vocación más clara que nunca y decide poner fin a su relación con Bruce e ingresar al convento definitivamente, pues ella sentía que esa debía ser su penitencia por los pecados de su padre.
Batman finalmente vuelve a su status quo de vigilante y aquí no ha pasado nada.
Y lo cierto es que la historia en sí quedó en una especie de limbo fuera de continuidad, pues no pasó mucho tiempo hasta que llegó el evento Hora Cero y el personaje de Joe Chill fue borrado completamente del canón. Se dictanimó que la tragedia de Batman se sentiría más cruda y dramática si el encapotado nunca hubiera encontrado al asesino de sus padres. En cierta forma Batman vería a ese criminal en todos los criminales y su cruzada sería aún más sombría y trágica.
Año Dos pecó de incoherente, bizarra y, por momentos, ridícula. Y todas estas falencias solo pueden potenciarse si nos ponemos a pensar que, se supone, esta obra debía ser la continuación de la fenomenal Año Uno. Todo mal. 4 Mollitos.